En tres de sus calles, Takayama conserva la arquitectura tradicional de madera y concentra tiendas antiguas y productores de sake. A su alrededor, se acerca a los 100.000 habitantes y se rinde a la modernidad.
Ogimashi revela una fascinante herencia de adaptabilidad japonesa. Ubicado en uno de los lugares más nevados de la Tierra, este pueblo ha perfeccionado sus casas con verdaderas estructuras anti-colapso.