En el segundo de los pinchazos que tenemos durante un recorrido por el lago Inlé, esperamos que nos traigan la bicicleta con la llanta remendada. En la tienda de carretera que nos acoge y ayuda, el día a día no se detiene.
En el segundo de los pinchazos que tenemos durante un recorrido por el lago Inlé, esperamos que nos traigan la bicicleta con la llanta remendada. En la tienda de carretera que nos acoge y ayuda, el día a día no se detiene.