Aterrizados en la capital caboverdiana de Praia, salimos descobriendo su predecesora pionera. Desde Cidade Velha, seguimos la cordillera montañosa de Santiago hasta la cima despejada de Tarrafal.
El pueblo de Tarrafal delimita un rincón privilegiado de la isla de Santiago, con sus pocas playas de arena blanca. Aquellos que están encantados allí encuentran aún más difícil comprender la atrocidad colonial del campo de prisioneros vecino.
Aterrizados en la capital caboverdiana de Praia, salimos descobriendo su predecesora pionera. Desde Cidade Velha, seguimos la cordillera montañosa de Santiago hasta la cima despejada de Tarrafal.
El pueblo de Tarrafal delimita un rincón privilegiado de la isla de Santiago, con sus pocas playas de arena blanca. Aquellos que están encantados allí encuentran aún más difícil comprender la atrocidad colonial del campo de prisioneros vecino.